1. Carta a mamá

*Quería empezar con algo diferente, digamos que empiezo a creer que esto se estaba convirtiendo en un diario personal y quien querría perder su tiempo leyendo la vida de una niña de 14 años?.
La verdad no quería caer tan bajoo haha. No quería perder la "calidad literaria" qe según tiene el blog. Y es por eso que hoy dije "No prendo la compu hasta que no tenga algo de provecho que escribir en mi blog". Fue una buena presión!
Y aquí esta el resultado.

1. Carta a mamá.

Mamá:

Era un día lluvioso, mamá, y no me dejaban entrar a tu habitación. Dicen que los pequeños no entendemos nada y no debemos estar ahí.

Sé que tu hablaste con mi tía y le dijiste que me sacara de ahí y me entretuviera un poco.
Los médicos no dejaban de entrar y salir de tu habitación y yo quería hacer lo mismo.
El blanco que había por todos lados me asustaba, me hacía sentir que no acabaría jamás.

Mi tía me sacó de ahí, pero yo no quería. Comencé a llorar.
Una enfermera se inclinó y besó mi cabeza.
Tus besos decían "Te amo", mamá. El de ella me supo a un "Lo siento".

Fuimos lejos y mi tía me compró un globo. Uno de esos que se elevan por el cielo. Ella me dijo que lo dejara volar y pidiera un deseo, y tal vez, Diosito me escuchara.
Yo solo quería que tu estuvieras bien, mamá, así que lo lancé y dije:
"Que mamá no sufra más, que mamá no sufra más, que mamá no sufra más"
El globo se elevó y se perdió en el infinito.

Yo podía oír tus gritos tan vívidos en mis sueños. Despertaba llorando y pensando en ti.
Fue así que me prohibieron ir al hospital.
Pero ellos decían que ya estabas mejor y que pronto volverías a casa.
Yo sonreía y compraba más globos, repitiendo la misma frase siempre, mamá.
Pero un día te dormiste y no volviste a despertar.

Mi tía entró a mi habitación y me abrazó, ni siquiera había llamado a la puerta y sus ojos rojos me previnieron, me asustaron.
Había mucha gente en la casa mamá. Todos sollozaban y yo quería huir.
Cuando mi abuela entró, se sentó junto a mí y me dijo que tu estabas en un lugar mejor, mamá y que ya no sufrías.
Y entonces, mamá, fue que entendí.
Perdóname mamá, solo espero que, en serio, ya no estés sufriendo más.

El globo se eleva una vez más. Espero que llegue a su destino y puedas leer esto, mamá.
Te amo...yo solo quería que estuvieras bien.
Lo siento mamá.